La conocí por redes sociales, creo que fue deseo a primera vista, de inmediato la encontré bellísima, siendo el dueño de mi clínica estaba seguro que había encontrado a la repartidora de volantes ideal para mí negocio.
Le escribí por mi cuenta real y quedamos de acuerdo en conocernos en la misma clínica, ella era aún más encantadora y sexy en persona, la promotora es de esas mujeres que desbordan sensualidad, su mirada, su respiración y su risa te encantan desde el primer momento… Es que ella sabía cómo demostrarle al mundo sus mejores atributos, el primer día llevaba unos jeans apretados y luego de explicarle que debía repartir volantes afuera de mi clínica siendo muy cordial con el público, ella pareció entenderme a la perfección con la cordialidad a la que me refería, luego de nuestra pequeña charla introductoria ella se dio la vuelta con los volantes que debía repartir y vi su culo perfecto, se me detuvo el corazón y la mente, esa imagen quedó grabada a fuego en mi memoria, ahora sabía que debía de alguna forma probar ese culo perfecto y a esa chica tan especial.
Pasaron los días y me obsesione con ella, yo tenía un muy buen prestigio, de hombre bueno y correcto, y no sabía bien como insinuarle siquiera que quería probar ese culo perfecto con el que tanto soñaba.
Lo que si sabía era su ambición
y que le encantaba el dinero, tuve que hacerme pasar por otros para poder saber si estaba dispuesta a tener sexo por una cantidad de dinero.
-hola busco a la chica de estas fotos… Eres tú?
-hola, sí… Dime
-soy Iván (mi primer pseudónimo) trabajo en una agencia de empleos y buscamos modelos y chicas que puedan hacer de promotoras o anfitrionas, y la verdad me ha encantado tu perfil.
-muchas gracias! Si yo encantada en trabajar ya he sido anfitriona de algunas discotecas.
-perfecto añadiré tu perfil y tomaré algunas fotos, si algún cliente nuestro quiere contratarte, te volveré a escribir, nosotros trabajamos con una comisión que nos pagan los mismos clientes directamente, así que el monto que te ofrezca será completamente para ti.
-buenisimo! Ojalá que salga algo sería bueno!
Deje pasar una semana y de nuevo le escribí a la chica…
-hola! Buen día soy Iván, tengo un cliente para ti, es como modelo para fotos… Tienes algún problema en hacer fotos artísticas?
-hola! Artísticas?
-sí, ya sabes desnudos, cuerpos pintados.. te pagaría 100.000 por una hora…
-jaja nunca lo he hecho pero sí… Por ese monto está bien…
-perfecto! Coordino todo…
Dejé pasar algunos días más… al final fue la propia promotora la que me escribió
-hola! Cómo estás?
-hola! Muy bien y tú?
-muy bien también, has sabido algo de tu cliente?
-ah si, lo mandé a la mierda…
-en serio?! Por qué?! Pucha yo justo me compré unas cosas pensando en iba a recibir ese dinero…
-de verdad disculpa, se me fue avisarte, pero es que el tipo se puso fresco, después que dijiste que sí, quería más cosas…
-ahhh
-sí, me quería pagar el doble si conseguía una hora de sexo contigo… Y lo mandé a la mierda, no somos agencia de escorts… Por eso lo descarté, pero se me olvidó avisarte… Mil disculpas, pero te puedo conseguir ser volanteras una mañana por 10.000 algo es algo…
-mmmm y el tipo estaba dispuesto a pagar 200.000 por una hora?
-sí… Por qué?
-es que igual sería bueno tener esas 200.000
-pero es a cambio de sexo…
-es que es harto dinero… Y es por una hora…
Dejé unos minutos de escribir…
-Si hubiese sabido no lo mando a la mierda… Quieres que lo intente ubicar?
-mmmm puedes?
-lo voy a intentar… Pero de verdad estás dispuesta a hacerlo con un desconocido por 200.000? Por qué si es así me anoto…
-jajajjajaja bueno en ese caso no tendrás que pedirle disculpas al cliente…
Seguimos conversando de forma cada vez más coqueta, habíamos fijado el día y el lugar… El lugar era justo abajo de mi edificio donde yo la veía repartir volantes… Y coquetear con los hombres que se acercaban a ella…
Al llegar la hora yo miraba por la ventana, estaba llegando, y me comunicaba con ella haciéndome pasar por Iván, el de la agencia de empleos
-donde estás?? Me preguntaba
-estoy llegando, voy un poco atrasado! Pero espérame!! Le respondía mientras bajaba las escaleras, salí con mi tenida clínica supuestamente iba al cajero automático que estaba a unos 20 metros de donde estaba ella.
-yo te conozco!! Le dije..acercándome a la promotora…
Ella miró para todos lados, mi saludo era sin duda el más inconveniente de todos en ese preciso momento…
-hola doc! Cómo está? Tanto tiempo!
-super bien! Te saludo y me voy al cajero, te ves bien!! Le dije saludando con la mano y haciendo que no tenía nada que ver con el supuesto agente de empleos, la cara de la bella promotora se relajó y se despidió de mi haciéndome señas con la mano
Del cajero saqué los 200.000 que le iba a pagar si aceptaba entrar a mi box, después de enterarse de toda la verdad… Respiré profundo y salí del cajero caminando en dirección a ella…
-aún por acá?
-es que estoy esperando a alguien
-a sí? Tienes una cita?
-jaja eso no se cuenta!
-pero parece que Iván va a llegar atrasado… Te dijo que venía atrasado no?
La cara de la promotora se puso como de «wtf!?» Pestañeó varias veces…
-tú eres Iván?!
-jaja bingo!!
-jajaj y por qué no me lo dijiste antes?! La cara de la promotora estaba roja…
-no sabría si ibas a aceptar … Y aún no sé si aceptarás… Que dices? Acá tengo tus 200.000…
-digo que sí… Me dijo con una sonrisa y cara de coqueta
Ella me acompañó a la clínica y aún media confundida dejó sus cosas en la mesa del escritorio se mi kinesiologa…
Entre risas recibí el primer beso de la promotora, sus labios gruesos y sensuales se sintieron como los labios que quería besar por el resto de mi vida… Pronto nuestras lenguas jugaban en el interior de nuestras bocas…
En el box de la kinesióloga tenía una bicicleta estática y un espejo de cuerpo completo, yo ya había arreglado todo para que el espejo quedara enfrente de la bicicleta, la desvesti suavemente, ella me beso, sus labios gruesos y esponjosos eran un paraíso, su forma de actuar era bien decidida, me bajo los pantalones del pijama quirúrgico y mi verga, ya completamente dura saltó de mis pantalones.
Ahí estaba ella frente a mi pene erecto hacia el cielo, y lo primero que hizo fue con la punta de su lengua rozar mi glande, luego la lengua la extendió por el tronco a ambos lados y por último abrió su boca y se tragó hasta la mitad de mi pene, sus chupadas solo me excitaban más y más y ella desnuda en cuclillas con las piernas abiertas mientras me la chupaba acariciaba su vulva que ya estaba húmeda, al fin la pare en frente mío, y con decisión la di vuelta para admirar su precioso culo perfecto, ahora era yo quien quería saborearla, la tumbé boca abajo sobre el escritorio, y con las manos abrí sus nalgas, su olor era exquisito, con mi lengua lamí su vulva y también su ano, su sabor me enloquecía y ella lo disfrutaba gimiendo tímidamente , mi lengua se iba hacia sus profundidades en ambos agujeros y cuando ya estuve saciado de su sabor la volví a incorporar y le hice sentar en la bicicleta, le dije que comenzara a pedalear y cuando lo hubo hecho, metí mi verga empapada en su saliva en su vagina empapada en mi saliva, entro resbaloso mi pene con facilidad mientras ella pedaleaba y yo miraba su cara a través del espejo, ella estaba en éxtasis al igual que yo, después saque por completo mi pene y lo puse en la entrada de su ano sin hacer excesiva presión, ella dejó de pedalear y como jalada por un imán su trasero se empezó a acercar a mi hundiendo mi pene en su culo lentamente, deliciosamente, una vez ya completamente adentro del culo, comenzó su pedaleo de nuevo, fue maravilloso, sentir sus músculos apretándose alrededor de mi pene, tenía muchas ganas de acabar dentro de su culo pero me contuve, aún quedaba mucha más acción.
La baje de la bicicleta y la puse en la camilla que estaba al lado boca abajo, me subí sobre la camilla y en cuclillas sobre ella volví a penetrarla por la vagina y luego por su ano, y de nuevo por la vagina y de nuevo por el culo, una estocada tras otra, ella ya no se quejaba de dolor por lo grueso de mi pene su ano estaba perfectamente dilatado y entraba con facilidad y hasta el fondo, ella con sus manos tomaba mis pies que estaban al lado de sus glúteos casi en los bordes de la camilla, al ver sus manos atrás las tomé y las crucé por la espalda, como si estuviese amordazada y amarrada, y así finalmente comenzé a follarla por el culo con toda mi fuerza hasta que al fin y en un gritó compartido, mi semen llenó desde adentro su exquisito culo, y refluyó hacia el exterior empapándole la vulva.
Ella se desplomó en la camilla exhausta y yo me quedé sentado en sus nalgas con el pene aún duro y botando aún semen, hasta que al fin nos incorporamos y decidimos seguir repitiendo nuestro acuerdo económico.


